Javier Antonio Pérez Aquino liderará el equipo de veedores que debe monitorear y certificar el cese del fuego y el desarme de la guerrilla de las FARC. “Es un honor haber sido elegido”, dijo
Javier Antonio Pérez Aquino será jefe de observadores del proceso de paz en Colombia
"Nadie va a acordarse de mi nombre pero sí que va a estar un argentino ahí". Las palabras las pronunció Javier Antonio Pérez Aquino apenas se confirmó la propuesta para ser el Jefe de Observadores de la Misión de las Naciones Unidas en Colombia. Ayer, la designación fue oficializada por las Naciones Unidas.
Con 35 años de trayectoria militar y experiencia tanto en el plano nacional como internacional, Pérez Aquino (57) dirigirá el contingente encargado de velar por el cumplimiento del histórico pacto alcanzado semanas atrás entre el gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC, que busca poner fin a décadas de conflicto armado que se cobró miles de vidas. El general estuvo en Cuba a propósito de las negociaciones que derivaron en el acuerdo y en los próximos días partirá junto a su esposa a Colombia, donde pasará al menos un año
A lo largo de su carrera, fue comandante de la Brigada de Monte XII en Argentina y de un regimiento de infantería paracaidista. Además se desempeño como director del Centro de Atención a las Emergencias Humanitarias en el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Argentina y jefe del Estado Mayor de la Fuerza de Despliegue Rápido del 2011 al 2014
En tareas similares a las que asumirá en los próximos días, se cuenta su servicio como observador militar en la Misión de Observación de las Naciones Unidas para Irak y Kuwait (UNIKOM) en 1993. Su formación contempla un título de licenciado en Estrategia y Organización, y una especialización en Conducción y Gestión Estratégica
"Desde el punto de vista profesional, es un honor haber sido elegido, es un puesto importante, no porque sea yo pero es muy bueno para la Argentina que ese puesto esté ocupado por un argentino", dijo Pérez Aquino a la prensa en declaraciones recogidas por el diario Misiones OnLine cuando se despidió de su brigada. "Que los hermanos colombianos lleguen después de más de 50 años de violencia interna a la paz, es fantástico, y poder ser parte de eso, poder colaborar en eso un poquito, a mí me llena de orgullo. Aunque sé que es un desafío que no es fácil, vamos a poner el máximo esfuerzo para que esto sea de la mejor manera posible", añadió.
La misión de observadores está conformada por unos 450 integrantes, provenientes de Guatemala, Paraguay, El Salvador, Argentina, Chile, República Dominicana y México. Un primer grupo de 23 ya se encuentra en Bogotá con los preparativos y se espera que el grupo se complete en un término de dos meses.
"Las Naciones Unidas estarán en capacidad de empezar las labores de monitoreo y verificación una vez se firme un acuerdo final de paz y el cese bilateral entre en efecto. Por ahora, el equipo en terreno está dedicado a actividades preparatorias, mientras que el Representante Especial del Secretario General, Jean Arnault, está activamente involucrado en las discusiones en La Habana sobre la implementación del cese al fuego", detalló un comunicado oficial.
El compromiso al que se sometió la guerrilla supone un proceso de desmovilización y desarme para concentrarse en 23 zonas transitorias y ocho campamentos