MONTEVIDEO — Rusia enviará un buque y técnicos de su Armada para la búsqueda del submarino argentino ARA San Juan, desaparecido el 15 de noviembre, pero aún tardará un tiempo hasta llegar a la zona, explicó a el ingeniero técnico naval Alejandro Vilches Alarcón.
"La flota de la Federación Rusa modernizó todos sus equipos de salvamento submarino a raíz de la tragedia del Kursk (en el año 2000), posee personal y buques de altas prestaciones, (pero) el problema es el tiempo que se tardaría en desplegarlos en la zona de búsqueda del ARA San Juan, ya que llegarán muy tarde", señaló el analista naval español.
El submarino nuclear ruso Kursk sufrió una catástrofe el 12 de agosto de 2000 al encontrarse a una profundidad de 108 metros durante unos ejercicios navales en el mar de Barents y sus 118 tripulantes perecieron.
El Ministerio de Defensa de Rusia informó que a la zona del rastreo fue enviado el buque oceanográfico Yantar de la Armada rusa, que "dispone de dos batiscafos que permiten realizar la exploración a una profundidad de hasta 6.000 metros".
El titular de esa cartera, Serguéi Shoigú, tras una conversación telefónica con su colega argentino Raúl Aguad, decidió también enviar al país sudamericano un avión de transporte militar con los técnicos del 328º destacamento de la Armada.
"El buque Yantar, que no es de rescate sino de trabajos en profundidades muy grandes, se encontraba rumbo a Luanda (capital de Angola), más próximo a la zona, pero aun así muy lejos" del territorio argentino, añadió Vilches Alarcón, quien ha trabajado en proyectos como el programa de submarinos S80 de la Armada española.
Además de Rusia, dijo el especialista, países como Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña o Turquía también "poseen personal y buques muy dotados".
La Armada argentina señaló que la búsqueda del ARA San Juan continuará hasta que se tengan datos certeros y corroborados de su posible ubicación o destino.
"Hasta no tener certezas y otros indicios que se puedan corroborar, vamos a continuar con el esfuerzo de búsqueda", afirmó el portavoz de esa fuerza, Enrique Balbi, en conferencia de prensa en Buenos Aires.
El militar confirmó también que el Gobierno argentino recibió información de un evento sonoro violento consistente con una explosión que estaría relacionado con la desaparición del submarino.
"Concretamente, se recibió una información de que fue un evento anómalo singular, corto, violento y no nuclear consistente con una explosión", señaló.
Vilches Alarcón, autor de los libros "Los SSBN de la URSS" y "Los SSGN de la URSS", considera que la opción más probable es que una explosión haya dado lugar a un rápido hundimiento que inhabilitó a toda la tripulación, "en cuestión de segundos, incluso para lanzar la boya" de alerta, opinó.
"Sigo creyendo que es la más factible de las opciones; son muy malas noticias, pero espero equivocarme y pensar que siempre existe una remota posibilidad" de que los 44 tripulantes del ARA San Juan puedan estar vivos.
El 15 de noviembre por la mañana, la nave señaló su última posición a 430 kilómetros del punto más cercano de la costa de la Península Valdés, frente al sureste de Argentina, cuando navegaba en aguas del Atlántico desde la ciudad austral de Ushuaia a su apostadero habitual en la Base Naval de Mar del Plata (este).
El buque, construido en Alemania en 1985, se encontraba en su segundo año operativo, después de verse sometido a una extensa reparación entre 2008 y 2014.