La empresa belga Kickstarter ha iniciado el desarrollo del que pretenden que sea el dron recreativo más seguro del mundo. El prototipo de este RPAS, denominado Fleye, tiene un diámetro de 23 centímetros y pesa 450 gramos. Incorpora una única hélice cubierta por una carcasa y rejilla inferior que lo envuelve por completo. De este modo es posible tocar el aparato sin peligro de sufrir lesiones por cortes.
El UAV integra dos cámaras, una de ellas situada bajo los sensores y el sistema de negación, otra en la parte superior cuyo objetivo es la obtención de imágenes de alta definición. Además, el RPAS cuenta con un sónar capaz de calcular distancias de hasta tres metros.
Su inventor, Laurent Eschenauer, asegura que tomó la decisión de acabar con los accidentes de drones. En esta línea ha trabajado para llevar a cabo un diseño lo más seguro posible para el operador y las personas que puedan cruzarse por el espacio que sobrevuele el aparato
https://www.kickstarter.com
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