Leonardo, KAI y Beechcraft visitan FADEA apuntalando sus posiciones

Sobre el envío al Congreso Nacional del Presupuesto de Defensa, con una importante partida destinada a la adquisición de aeronaves de diverso uso hace suponer que, si ambas cámaras legislativas lo aprueban, se pueda iniciar un ciclo de recuperación de las capacidades aeronáuticas de las Fuerzas Armadas argentinas. En ese marco, la empresa estatal cordobesa FADEA (Fabrica Argentina de Aviones) ha recibido en estos días a varias delegaciones de funcionarios y técnicos de empresas aeronáuticas internacionales.

El requerimiento de las Fuerzas Armadas está claro: han perdido su capacidad operacional y la situación ha llegado a un punto crítico, especialmente en la Fuerza Aérea y Aviación Naval. Tras años de una desinversión manifiesta, la salida de servicio por antigüedad de muchos sistemas aeronáuticos muestra un panorama desolador. Existe otro punto taxativo, toda adquisición de material extranjero deberá incluir la participación de la industria autóctona, estatal y privada. De tal modo, FADEA estará incluida, sí o sí, en cualquier programa de provisión de material. Se está produciendo así la visita de especialistas y técnicos de varias empresas internacionales cuyos productos han sido ofrecidos a Argentina.

Korea Aeroespace Industries (KAI), el conglomerado industrial italiano Leonardo Finmeccanica y los estadounidenses de Beechcraft Aircraft visitaron las instalaciones de la empresa FADEA para conocer sus capacidades. Los empresarios extranjeros hablaron sobre las posibilidades técnico-operativas y los acuerdos de compensaciones que podrían alcanzarse.

Este tipo de conversaciones son muy complejas ya que intervienen factores tecnológicos, jurídicos, de comercio exterior, y por supuesto, políticos.

En las mismas intervienen todo tipo de especialistas y consultores específicos, que tienen ante si un tiempo largo de análisis de las inversiones, posibilidades y realidades del negocio. También sabemos, que dichas negociaciones son más o menos arduas, según el monto del contrato y de las unidades a usar por el país comprador, en este caso la Argentina. La posibilidad muy probable de que la Nación adquiera elementos aeronáuticos de alguno de estos renombrados fabricantes internacionales hace atractivo el intercambio mencionado. (Luis Piñeiro)