Los primeros misiles hipersónicos rusos Tsirkon serán emplazados en el buque de guerra Almirante Najímov, que, una vez finalizada su modernización, se reincorporará a la Armada rusa en 2018, informa Rossiyskaya Gazeta.
Igualmente, después del Almirante Najímov, la siguiente embarcación en recibir esta clase de misiles será el crucero de propulsión nuclear Pedro el Grande —Piotr Veliki, en ruso—
Actualmente, los misiles hipersónicos Tsirkon se encuentran en la etapa final de su diseño. Su radio de alcance es todo un secreto, pero de acuerdo con los datos preliminares se cree que podría ser de entre 300 y 400 km.
Una vez terminado el proyecto, estos misiles prometen alcanzar una velocidad de entre 5 y 6 Mach, es decir, de entre 5.900 y 7.100 kilómetros por hora. Las primeras pruebas ya demostraron que este proyecto tiene la capacidad de alcanzar 5.300 kilómetros por hora por un corto período. Se espera que los siguientes ensayos tengan lugar en 2017, de modo que en 2018 podría iniciarse su producción en serie.
El buque de guerra Almirante Najímov permanece en el dique de Sevmash, en el puerto de Severodvinsk, en el mar Blanco, desde el año 1999. Su vida operativa se prolongará por 35 años una vez terminada la profunda modernización a la que está siendo sometido.
Los Tsirkon están destinados a sustituir a los misiles supersónicos Granit presentes en las naves rusas. Estos antiguos misiles fueron diseñados en el período soviético y posteriormente también han pasado por varios procesos de modernización.
De esta manera, los Tsirkon pueden ser emplazados no solo en el Almirante Najímov y su buque gemelo, el Pedro el Grande, sino también en los submarinos rusos de nueva generación y el portaviones ruso Almirante Kuznetsov, que actualmente también está armado con los Granit
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