Inicio

Enlaces

domingo, 30 de junio de 2019

¿Puntada final en Osaka a la compra de aviones de combate a Corea del Sur?

Las negociaciones entre Defensa y la empresa Korea Aerospace Industries comenzaron en 2016. Se busca un reemplazo para el A4-AR

El presidente surcoreano, Moon Jae-in tuvo el primer encuentro bilateral con Mauricio Macri en la residencia de Olivos en 2018 durante la Cumbre del G-20 que se realizó en Argentina. Ahora en Osaka, Japón, sede de la reunión 2019 del G-20 podría darse la puntada final entre Macri y Moon Jae-in para la adquisición de aeronaves de combate de fabricación coreana destinadas a la Fuerza Aérea Argentina.

El ministerio de Defensa pactó una operación de compra de 8 aviones nuevos, más un simulador y armamento con la compañía Korean Aerospace Industries (KAI) en una suma de 440 millones de dólares a pagar con un crédito a 10 años con 2 de gracia. 

Se dice que la negociación está firme pero aún faltaría una contraoferta de Leonardo, el grupo italiano al que también se requirió cotizar por una decena de sus aparatos M-346 FA. Todo comenzó con dos notas de carácter “Confidencial” que el titular de la Fuerza Aérea, brigadier mayor Enrique Amrein, envió el 8 de junio de 2016 al entonces ministro de Defensa, Julio Martínez. Los expedientes ingresaron a mesa de entradas con el número MD N°1049/2016. En ellos el jefe aeronáutico dice que “. . . ante la próxima desprogramación del Sistema de Armas A4-AR esta fuerza se encuentra estudiando distintos S.Arm. (s) cuyas características permitirán introducir al personal en tecnología del siglo XXI a costos razonables obrando como herramienta que facilite la transición hacia un avión de 4ta generación”. Las notas presentaban al ministro dos aparatos de entrenamiento avanzado con limitada capacidad de ataque ligero y se requería cotización por 10 aeronaves. 

El de origen italiano fabricado por Leonardo bajo la denominación base M-346 Master y otro, -favorito de la cúpula aérea criolla- desarrollado por la empresa Korea Aerospace Industries, el KAI T-50 Golden Eagle. Las versiones que interesan de ambos aviones son las de configuración más avanzada identificadas por el acrónimo FA (Fighter Attack, en inglés). Los dos aparatos se diseñaron para entrenamiento avanzado de pilotos de combate pero el mercado de países con presupuestos reducidos motivó que se hicieran desarrollos llevándolos a la versión de caza ligero para un uso dual tanto en adiestramiento como en misiones de guerra reales.


El avión coreano FA-50 alcanza velocidades supersónicas (1.5 mach) un atributo que no posee la máquina italiana M-346 FA, aunque esta última tiene dos motores característica que garantiza una gran supervivencia en el campo de batalla frente a averías en la planta de poder. 

En marzo de 2017 durante la celebración del 68 aniversario de la VI Brigada Aérea de Tandil, el comodoro Pedro Notti, titular de la base dijo en público: “hoy tenemos un avión de entrenamiento, de transición (en referencia al Pampa III), pero no tengo dudas de que en poco tiempo va a estar aquí otro de superiores características, la Fuerza Aérea ya se ha pronunciado a favor de un sistema, que es el avión coreano FA 50, y el Gobierno nacional está detrás del financiamiento externo para encarar esa compra”. 

En Tandil estaban basados los cazabombarderos Mirage, desprogramados en 2015 y sin reemplazo a la vista excepto por la opción surcoreana que no es un caza puro de combate. En febrero de 2018 ejecutivos de KAI actualizaron la oferta de venta y financiación ante colaboradores de Oscar Aguad. Por si fuera poco, a esa seguidilla de indicios favorables a la góndola surcoreana habría que agregarle un dato curioso.


En el despacho presidencial de Olivos, en las repisas superiores a ambos lados de la biblioteca, Macri tiene dos maquetas: una del FA-50 y otra de un helicóptero KUH-1 Surion, modelos de las aeronaves que fabrica Korea Aerospace Industries

La opción coreana se completa con el ensamblado de cuatro aeronaves FA-50 en la Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA) y la disposición inmediata de dos aviones para el entrenamiento y habilitación de pilotos y técnicos contra el pago adelantado de 10 millones de dólares. Antonio Beltramone, CEO de FAdeA y el director de Nuevos Negocios, Fernando Sibilla empujaron la oferta surcoreana entusiasmados por agregar un nuevo proceso productivo a la capacidad instalada de la planta cordobesa aunque sólo se trate de ensamblar partes y conjuntos provistos por KAI

Las pequeñas y medianas empresas del sector especializado de las industrias aeronáuticas criollas se puso en guardia. Enterados de la negociación pugnan para que Defensa dé cumplimiento a la ley Nº 27.437 de Compre Argentino que establece que en las compras grandes del Estado a proveedores extranjeros se harán acuerdos de cooperación con firmas locales para transferir tecnología, bienes o servicios vinculados al contrato objeto de la operación

No hay comentarios:

Publicar un comentario