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sábado, 21 de noviembre de 2020

La Guardia Costera de Japón y el JMSDF planean usar UAVs para la vigilancia del océano


la Guardia Costera de Japón (JCG) demostró a los medios de comunicación locales las capacidades del SeaGuardian MQ-9B de General Atomics. 


Es un vehículo aéreo no tripulado especializado en vigilancia marítima. El evento tuvo lugar en la Base Aérea Hachinohe de la Fuerza de Autodefensa Marítima de Japón (JMSDF) en la Prefectura de Aomori y el colaborador de Naval News en Japón, Yoshihiro Inaba, estuvo presente

Informe de Yoshihiro Inaba desde la Base Aérea de Hachinohe en la Prefectura de Aomori

El SeaGuardian es un vehículo aéreo no tripulado de vigilancia marítima desarrollado por General Atomics Aeronautical Systems (GA-ASI) que puede volar a una altitud de 40.000 pies (12.000 metros) y puede volar de forma continua hasta 30 horas (más de 25 horas en la estación). La aeronave está equipada con el radar multimodal Lynx de GA-ASI y el radar SeaVue de Raytheon, así como con un sensor EO/IR para vigilar vastas zonas del océano en todas las condiciones meteorológicas.

El UAV SeaGuardian de General Atomics durante la campaña de demostración con la Guardia Costera de Japón en la Base Aérea de Hachinohe en la Prefectura de Aomori. Foto de Noticias Navales por Yoshihiro Inaba.

La decisión del JCG de considerar la introducción de los UAVs fue impulsada por la decisión del gobierno japonés en diciembre de 2016 de adoptar una nueva política para la seguridad marítima. La política tiene por objeto fortalecer el funcionamiento del JCG en respuesta a la reciente actividad de los buques pesqueros y gubernamentales chinos en las aguas que rodean al Japón. Por lo tanto, se decidió considerar la introducción de los vehículos aéreos no tripulados con el fin de vigilar continuamente esos buques extranjeros, especialmente los que operan dentro de la vasta Zona Económica Exclusiva (ZEE) del Japón. De hecho, las aguas territoriales del Japón, más su ZEE, son las sextas más grandes del mundo, y sería difícil vigilar una zona tan vasta con aviones tripulados y buques patrulleros solamente.

Según el JCG, se realizarán un total de 13 vuelos, 150 horas de vuelo de prueba, durante las cuales se comprobarán varios elementos de prueba. Por ejemplo, el Bombardero Q300 (DHC-8-315) operado por el JCG se utilizó para comprobar el sistema de evitación de colisiones del SeaGuardian, y junto con el buque patrulla Hida (PL-51) se comprobaron las capacidades de identificación diurna y nocturna de los buques del SeaGuardian.

El radar SeaVue de Raytheon

Sensor EO/IR

Estación de control terrestre para el SeaGuardian

Fotos de Noticias Navales de Yoshihiro Inaba

La ventaja de los vehículos aéreos no tripulados es su capacidad de operar continuamente las 24 horas del día, lo que constituye una gran ventaja en comparación con los aviones tripulados. A este respecto, el Grupo Consultivo Mixto tiene la intención de trasladar muchas de las misiones que actualmente llevan a cabo las aeronaves tripuladas a los vehículos aéreos no tripulados, con miras a la futura disminución de la población. Por lo tanto, la prueba de demostración también verificó la capacidad del SeaGuardian para encontrar personas en peligro durante las misiones de búsqueda y rescate y para observar la actividad volcánica.

En ese caso, según los funcionarios del JCG, si se introdujeran los SeaGuardians, se necesitarían al menos tres aeronaves para vigilar las aguas que rodean el Japón las 24 horas del día.

La importancia de las pruebas de demostración de vuelo para el JMSDF

El UAV SeaGuardian de General Atomics durante la campaña de demostración con la Guardia Costera de Japón en la Base Aérea de Hachinohe en la Prefectura de Aomori. Foto de Noticias Navales por Yoshihiro Inaba.

Como ya se ha mencionado, la prueba está basada en la base aérea JMSDF. Esto es muy significativo. De hecho, los datos de esta prueba serán compartidos con el JMSDF, dijo el oficial del JCG. Actualmente, el JMSDF también está explorando la introducción de los UAVs para tener en cuenta el impacto de la futura disminución de la población, y en el Programa de Defensa a Medio Plazo (FY 2019 - FY 2023) anunciado en diciembre de 2018, se especificó que los UAVs serán considerados para su implementación.

Desde esa perspectiva, los SeaGuardians son una opción muy viable. No sólo puede llevar sensores de radar y EO/IR en el fuselaje, sino que también puede llevar el sistema Leonardo SAGE 750 Electronic Support Measure (ESM), lo que significa que puede ser desplegado en misiones ELINT también. Además, el SeaGuardian puede llevar docenas de sonoboyas bajo sus alas, que pueden ser lanzadas y controladas para llevar a cabo la guerra antisubmarina (ASW).

Actualmente, el JMSDF tiene cerca de 70 aviones de patrulla marítima P-3C y P-1 en su flota, pero el JMSDF podría operar el MPA de manera más eficiente si éstos fueran sustituidos por el traslado de la vigilancia marítima en tiempo de paz al SeaGuardian y la realización de ASW junto con él en tiempo de guerra.

Los recientes éxitos de exportación del SeaGuardian


Para las misiones ASW, el SeaGuardian puede llevar de dos a cuatro dispensadores de sonoboyas bajo sus alas. Imagen del GA-ASI.

Sólo este mes, el Departamento de Estado de los Estados Unidos aprobó posibles ventas militares extranjeras de MQ-9B con kits de misión de guerra antisubmarina a los Emiratos Árabes Unidos y Taiwán.

El avión no tripulado también está siendo considerado por varios otros clientes.

Fuente:https://www.navalnews.com

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