El próximo jefe de la Fuerza Aérea de EE.UU quiere al menos 145 bombarderos furtivos B-21

Las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos quieren adquirir al menos 145 B-21 Raider de Northrop Grumman, cuyo coste se estima en más de 90.000 millones de dólares.

El nominado por el presidente Joe Biden para ser el próximo secretario de la Fuerza Aérea, Frank Kendall, dice que "es una cifra razonable, en este momento".

Los comentarios de Kendall se hicieron durante una audiencia de confirmación para su nuevo puesto en el Comité de Servicios Armados del Senado el 25 de mayo.

En dólares de 2010, la USAF dijo en el momento de la adjudicación del contrato que esperaba que los jets salieran a 511 millones de dólares cada uno. Ajustado a la inflación, el precio sería de 626 millones de dólares y superaría los 90.000 millones de dólares para 145 unidades. Sin embargo, la cifra de adjudicación del contrato se calculó sobre la base de una compra de 100 aviones; un mayor volumen de producción reduciría naturalmente los costes unitarios.

"Creo que es una cifra razonable, en este momento", dijo Kendall en relación con la cifra de 145 B-21. "Estamos muy lejos de conseguirlo, y las necesidades pueden cambiar con el tiempo... [pero] como base para gestionar el programa creo que es razonable ahora mismo".

El bombardero estratégico con armamento nuclear B-21 está destinado a sustituir a su predecesor, el B-2 Spirit, así como a la envejecida flota de B-1B.

Un avión B-2 Spirit se prepara para su lanzamiento en la base aérea de Whiteman. Imagen: Foto de la Fuerza Aérea de EE.UU. por el aviador senior Thomas M. Barley

Northrop Grumman está desarrollando actualmente dos prototipos de B-21 en la planta 42 de la USAF en Palmdale, California. Está previsto que el primero de ellos realice su primer vuelo en 2022.

Parece probable que el candidato sea confirmado, junto con otros dos elegidos por la administración Biden. Varios senadores elogiaron sus selecciones, incluido el presidente del comité, Jack Reed.

Una tabla que muestra las estimaciones de costos de la CBO para el B-21 y otros sistemas de armas estratégicas estadounidenses.

"Anteriormente, [cada uno de ustedes] ha demostrado la consideración, y la integridad, y el compromiso que es esencial para formar parte del Departamento de Defensa", dijo Reed. "Espero con interés sus confirmaciones".

El bombardero B-21 parece estar a salvo dentro del presupuesto y del calendario, según informó Aerospace Manufacturing en abril. El congresista Adam Smith, presidente del Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes, dijo que una sesión informativa sobre el programa del bombardero furtivo fue "una de las cosas más positivas y alentadoras que me han ocurrido en las últimas dos semanas".

Según la Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO), en 2016, la Fuerza Aérea había estimado que costaría 80.000 millones de dólares la compra de los primeros 100 B-21, lo que equivale a algo más de 89.000 millones de dólares en 2021. 

El año pasado, la CBO estimó que el coste total de la compra de un B-21 y 10 misiles de crucero Long Range Stand-Off (LRSO) para ir dentro rondaría los 500 millones de dólares, y la Fuerza Aérea tendría que gastar otros 40 millones de dólares cada año para operar y mantener ese paquete completo.

Smith explicó que las Fuerzas Aéreas de EE.UU. parecen haber "aprendido las lecciones" del programa F-35, cuyo presupuesto se ha excedido. Por el contrario, el B-21, que está siendo fabricado por Northrop Grumman, está "dentro de los plazos y del presupuesto, y lo están haciendo funcionar de forma muy inteligente".

Fuente:https://news.northropgrumman.com