Inicio

Enlaces

lunes, 30 de agosto de 2021

I Am T-7A Red Hawk - El entrenador de la nueva generación de aviones de la USAF se hizo para romper la norma

  • ¿Qué pasaría si tuvieras que aprender a conducir un Mazda de 2006, sabiendo a ciencia cierta que tu coche real sería un Mercedes-Benz Clase A de 2021? La cosa se complica aún más si hablamos de pilotos estadounidenses que deben aprender a manejar los aviones más avanzados de su país

"La distancia entre el T-38 y un F-35 es de noche y de día", dijo el general David L. Goldfein, jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Aéreas de EE UU. El F-35 y el F-22 son los cazas de quinta generación de la USAF, y el T-38 es el avión de entrenamiento que se utiliza actualmente, con una trayectoria de décadas.

Aunque el avión de entrenamiento supersónico T-38 Talon se sometió a un complejo proceso de modernización en la década de 2000, sólo se pretendía prolongar su vida útil hasta 2020. Lo cierto es que la flota de T-38 está envejeciendo, y el fatal accidente de 2019 lo confirmó

Apenas un año antes, en septiembre de 2018, el sistema avanzado de entrenamiento de pilotos T-X, diseñado por Boeing y Saab, había sido seleccionado por la USAF, para sustituir a la flota de T-38 de casi 60 años


Los aviones militares tecnológicamente más avanzados de hoy en día requieren un entrenador a reacción igualmente capaz, y para eso se diseñó el programa T-X de la USAF. El contrato de 9.200 millones de dólares que se había adjudicado a Boeing incluía 351 aviones T-7A, 46 simuladores y el equipo de tierra asociado.

El futuro entrenador recibió el nombre de Red Hawk, en honor a los Tuskegee Airmen, también conocidos como los Red Tails, la primera unidad de pilotos y personal afroamericano que luchó en la Segunda Guerra Mundial. 


Sus aviones P-51 Mustang tenían colas rojas distintivas, lo que les dio el famoso nombre que ahora se asociaría con el más reciente entrenador a reacción.

El T-7A cambia las reglas del juego, desde la forma innovadora en que se ha desarrollado hasta sus impresionantes capacidades. Fue diseñado por Boeing utilizando procesos basados en modelos 3D que le permitieron pasar del concepto al primer vuelo en sólo 36 meses, para la competición de la USAF. A principios de 2021, dos aviones T-7A ya estaban en pruebas de vuelo, listos para pasar a la segunda fase de pruebas a finales de este año.

Según el fabricante, el proceso de desarrollo del T-7A, que "rompe las normas", supuso una reducción del 80% en las horas de montaje, una reducción del 50% en el tiempo de desarrollo y verificación del software, y un aumento del 75% en la calidad de la ingeniería. Las técnicas de diseño y fabricación digital también permitieron que el futuro avión de entrenamiento pudiera integrar capacidades adicionales con mayor rapidez y facilidad.

Otro aspecto innovador del Red Hawk es su diseño de fácil mantenimiento. Tal y como afirmaron tanto Boeing como las Fuerzas Aéreas, una de sus principales ventajas es el hecho de haber sido desarrollado "pensando en los encargados del mantenimiento". Esto significa que se construyó con características tales como una cubierta de apertura lateral, para un rápido cambio de asiento de eyección, acceso vertical a las puertas ("alas altas"), además de paneles y puertas desplegables, para un acceso rápido y fácil.
Además, el uso de piezas intercambiables (timones y actuadores) facilita las cosas en lo que respecta a las cadenas de suministro. En cuanto al motor, Boeing afirma que "cuatro personas pueden cambiarlo antes del almuerzo". En definitiva, estas características hacen que el futuro avión de entrenamiento sea más fácil de mantener, con menos costes, a la vez que se reducen los costes del ciclo de vida a lo largo del tiempo.


Boeing T\-7A Red Hawk Jet Trainer

El Red Hawk también es tan eficaz como fácil de mantener. Tal y como afirmaron los responsables del Ejército del Aire en el anuncio del avión, el nuevo motor único del T-7A puede generar casi tres veces más empuje que los motores duales del T-38C. También es capaz de volar de una manera más cercana a las condiciones del mundo real, gracias a las colas gemelas y a las grandes extensiones de raíz del borde de ataque que permiten maniobrar con precisión a bajas velocidades.

Dado que su principal objetivo es preparar a los pilotos para los cazas de quinta generación, este avión de entrenamiento integra capacidades de las que carecía el T-38C, como las características de vuelo con alto ángulo de ataque, las operaciones nocturnas y la gestión de la información y los sensores. Con la ayuda de este entrenador de nueva generación, los pilotos estarán mejor equipados para manejar enlaces de datos, información de radar y armas inteligentes.


Entrenador de jets Boeing T\-7A Red Hawk

El innovador ADN digital del T-7A incluso ha ayudado a acelerar las pruebas y a descubrir problemas que normalmente habrían tardado años en detectarse. Recientemente, uno de los dos jets ya construidos, superó con éxito una prueba de maniobrabilidad de alto ángulo de ataque, después de que se detectara previamente una anomalía llamada "wing rock" y se solucionara.


Aunque la reciente crisis sanitaria ha retrasado la producción del T-7A, los representantes de Boeing y de la USAF confían en que los primeros reactores de entrenamiento lleguen a la Base Conjunta San Antonio-Randolph, en Texas, en 2023, lo que marcará el inicio de una nueva era en la formación de pilotos militares. No es de extrañar que el T-7A Red Hawk haya sido incluido en la lista de las 100 "innovaciones más fundamentales, influyentes y sencillamente asombrosas" del año de Popular Science, en 2019.

Fuente:https://www.autoevolution.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario