La retirada de las sanciones a las empresas iraníes es "ingenua"

Israel señala que la amenaza continua y creciente de los misiles iraníes es uno de los factores que impulsan el desarrollo de sistemas de defensa eficaces, como el interceptor ARROW 4. (Foto: IAI)

Reacción no oficial de Israel, inequívoca

Cuando el 8 de octubre el Departamento del Tesoro de Estados Unidos retiró a dos empresas iraníes -Mammut Industries y su filial Mammut Diesel- de su lista de "nacionales especialmente designados", la reacción israelí fue feroz. Ninguna agencia gubernamental israelí estaba dispuesta a hacer comentarios, pero altos funcionarios calificaron en privado la medida estadounidense de "ingenua", afirmando que ignoraba la realidad.

Fuentes israelíes indican que las dos empresas siguen desempeñando un papel destacado en el programa de misiles balísticos de Teherán, y una de esas fuentes calificó su retirada de la "lista negra" de "decisión estúpida". Efectivamente, a Israel le parece que la decisión de Washington de sustraer a las dos empresas de los efectos de las sanciones -impuestas por la campaña de "máxima presión" del presidente Trump, destinada a forzar a Teherán a volver a la mesa de negociaciones para resolver las diferencias sobre su programa nuclear- en realidad ayuda a que el programa avance aún más rápido.

Un reconocido experto en asuntos de Oriente Medio, el doctor Mordechai Kedar, sugirió que cuando dos acontecimientos aparentemente inconexos ocurren simultáneamente, lo más probable es que estén, de hecho, estrechamente relacionados. "La retirada de las sanciones [fue] declarada en paralelo a otro esfuerzo estadounidense para llevar a Irán a la mesa de negociaciones", declaró, añadiendo que Washington buscaba desviar la atención de la cuestión nuclear iraní para poder centrar los esfuerzos en el "gran enemigo": China.

En un artículo publicado por el Centro Begin-Sadat de Estudios Estratégicos, Ofira Seliktar y Farhad Rezaei afirman que una consecuencia de la derrota de Estados Unidos en Afganistán ya ha quedado clara. "La manera inepta y caótica de la retirada estadounidense cimentó la opinión de Teherán de que el presidente Joe Biden es un debilucho al que se puede ignorar con seguridad", escribieron.

Arie Egozi informa desde Tel Aviv para MONCH

Fuente:https://monch.com