El jefe de la Fuerza Aérea Argentina, brigadier general Xavier Isaac Foto: FAA
El jefe del Estado Mayor General de la Fuerza Aérea Argentina (FAA), brigadier mayor Xavier Julián Isaac. Dialogamos sobre el balance de gestión, principales proyectos, posibles adquisiciones, mayores desafíos y objetivos.
Isaac explicó que actualmente tienen distintas ofertas para la adquisición de un nuevo caza para la FAA, principalmente de Rusia y China, pero que esperan también propuestas de Estados Unidos e India.
"La idea es tener para fin de año todas las ofertas lo más completas posibles y presentarlas al Ministerio de Defensa en el primer trimestre del año que viene para poder definir el avión y su respectivo financiamiento", aseguró el jefe de la FAA.
¿Qué evaluación puede realizar de este período como jefe de la fuerza?
El haber pasado por la Dirección General de Planes, Programas y Presupuestos me permitió tener una idea acabada de la situación general. No era un momento fácil producto de muchos factores y con la autoestima un poco baja, lo que impactaba en la motivación de la gente. Si bien se trabajaba bien, no con el grado de compromiso que uno pretende para la FAA. Apoyo mi gestión en volver a darle valor y proyección al trabajo de la gente para que se sienta involucrado, participe de la FAA y que tenga ese orgullo de pertenecer, que vea que el nuestro es un estilo de vida, una vocación, una familia e implica entregar todo nuestro esfuerzo.
¿Cómo se recibió el cambio de titularidad en la cartera de Defensa?
Fue sorpresiva la salida del ministro (Agustín Rossi) con quien veníamos trabajando, y con el que teníamos una relación muy estrecha.La pandemia acercó mucho a los jefes de Estado Mayor con el ministerio parallevar adelante el trabajo diario. He tenido la posibilidad de reunirme con el nuevo ministro (Jorge Taiana), a quien se le expuso la situación de la fuerza demostrándose muy interesado en los temas de defensa y conocedor de varias actividades de nuestra institución. Hay continuidad, se nota y a modo de ejemplo algo tan importante como el Fondo Nacional de la Defensa (Fondef) continúa y estamos trabajando tenazmente.
El Fondef fue el principal caballo de batalla del ministro Rossi. ¿Qué impacto real se espera del mismo?
Ya lo estamos viendo, no son palabras, son hechos concretos. La recuperación del F-28 TC-53 es resultado directo del Fondef. En cuanto a los B200, si bien el convenio estaba firmado al principio de la gestión, en 2020, los fondos que insume su puesta a punto, modernización, la mejora del sistema, son productos directos de los recursos que brinda el fondo. Otro ejemplo, la inspección de los MI-171, ha comenzado y se espera la primera unidad en servicio a principios del año que viene y tenemos presupuestado la segunda en forma inmediata. Estamos licitando la modernización de la cabina de los Tucano. Seguimos apoyando el sostenimiento de los repuestos de la flota de Hercules. Tenemos grandes proyectos para nuestros UAV que vamos a materializar a fin de año con el traslado a la Base Aérea de Chamical de todos nuestros medios no tripulados. Estamos muy cerca de completar el contrato de los Texan que había quedado una parte de cuotas. Sinceramente podría nombrar varias cosas más. Para la FAA el Fondef tuvo un gran impacto en esta primera etapa.
¿Cuáles son las principales necesidades de la FAA?
Las necesidades, sinceramente, son múltiples. Me gusta dejar en claro que la misión principal de la FAA es la vigilancia y control del espacio aéreo, que se controla efectivamente con aviones caza. La FAA está en la búsqueda incesante para posicionarse íntegramente en un caza de 4º generación; el gobierno, el ministro, y el jefe del Estado Mayor Conjunto están en la misma sintonía. Lo que quiero resaltar fundamentalmente es que la FAA no se acaba en el caza de 4º generación, no se debe minimizar todo lo que se está haciendo, solamente porque no llegó el caza de 4º generación.
¿En qué se está trabajando?
Hay muchas cosas que estamos haciendo. La aviación de transporte estaba con pocos medios aéreos, y la FAA necesita una aviación de trasporte táctico y estratégico, con aviones turbo y a reacción en todos los segmentos. Después de un año y medio, esta capacidad se va recomponiendo lentamente con la incorporación del Boeing 737, con la puesta en servicio de más F-28, con la incorporación de los B200, con la puesta en servicio de un tercer Saab 340 y con la próxima incorporación de otra unidad. Con la decisión de posicionar los MI-171 en la Antártida liberamos Twin Otter para dedicarse a vuelos de transporte en el continente. Estamos redimensionado y relanzando Líneas Aéreas del Estado (LADE), línea insignia de la FAA en el sur, fundamental para los pueblos de la Patagonia. Con la reactivación de la Dirección de Seguridad y Defensa vamos a destinar personal pura y exclusivamente a esta actividad liberando de esa tarea al personal militar subalterno técnico para que dediquen su tiempo al mantenimiento de la flota permitiendo mayor disponibilidad de medios en servicio al disponer de mayor tiempo. Buscamos incorporar más aviadores militares en la Escuela de Aviación Militar, el IA -100 está directamente relacionado con eso. Cuando esté en servicio va a permitir mayores egresos y en vistas que se está volando más y con más medios vamos a necesitar incrementar la cantidad de pilotos, es una realidad.
¿Qué planes hay para recuperar esta capacidad supersónoca?
Tenemos varias ofertas, está el JF-17 chino, los MIG-35 y MIG-29 rusos. Si bien no tenemos ninguna oferta concreta por parte de los Estados Unidos, sí sabemos que están preparando una. Tuvimos también un acercamiento con la India, que está queriendo ofrecernos el Tejas pero estamos recién en las primeras conversaciones. Algunas ofertas no tienen el nivel de detalle que queremos en cuanto a armamento, sostenimiento, cadena logística, performance, etc. La idea es tener para fin de año todas las ofertas lo más completas posibles y presentarlas al Ministerio de Defensa en el primer trimestre del año que viene para poder definir el avión y su respectivo financiamiento.
¿Cree que puede haber alguna participación de Fadea?
Eso es fundamental. No nos imaginamos ninguna adquisición sin un grado de offset. Creo que el arte está en lograr el mayor offset posible, no solamente el ensamblado, que es lo más básico. El offset es una condición que pusimos, aunque no la hemos detallado, eso llegará al momento del contrato, pero vamos a tratar de ser inteligentes y ver la mayor capacidad que pueda lograr Fadea.
¿Existieron otros ofrecimientos por parte de Rusia?
Hubo un ofrecimiento informal con respecto a los MI-171. En su momento no sabía cómo iba a llevar a cabo la inspección de los dos MI-171 que tenemos, por lo que no tenía mucho sentido comprar más si no poseíamos la capacidad de sostener dos. Con el Fondef en marcha y avanzando con la inspección de los helicópteros que tenemos, sí hemos estado hablando para ver la probable incorporación de un tercero, algo lógico. La idea es estacionar un MI-171 de manera permanente en la Antártida, tener uno en el continente para mantener a las tripulaciones de relevo adiestradas y un tercero para sostener las actividades cuando alguno entre en inspección. En cuanto a un eventual ofrecimiento de material de defensa antiaérea, es un tema que lo ha tomado el Estado Mayor Conjunto y somos respetuosos de cómo lo está manejando con los diferentes asesores especialistas de la fuerza.
¿Qué planes hay con los A-4AR? Rossi había anunciado la recuperación de alrededor de ocho para fin de año.
Si bien la prioridad absoluta está en la búsqueda de un avión de 4º generación, no hay que olvidarse que empezamos la gestión con un A4 y medio en la línea, y ya vamos por siete. Proyectamos a tener 12 el año que viene y de ser posible 18 antes del 2023. Hoy la columna vertebral y único avión de combate que tiene la FAA es el A4.
¿Qué vida útil les quedan?
Como están los aviones, todo lo que la FAA lo pueda sostener. Salvo rarísimas excepciones, ningún avión de la FAA se discontinuó porque el avión estaba exhausto en sus células. Hay aviones con menos de 100 horas de célula. Todos los aviones de la FAA, sin distinción, tienen un remanente inmenso en horas de vuelo. Estoy convencido que el A4 tiene tanta vida útil como la FAA lo pueda sostener, lo cual no quiere decir que nos quedemos con el A4 de acá a los próximos 30 años, y no busquemos nada más. Pero si el A4 tiene que volar 10 o 15 años más y tenemos un avión de 4º generación al lado, se va a seguir volando. Es un avión difícil de mantener porque está muy customizado, es verdad, pero también es el único que nos da la capacidad de cazabombardero y no queremos perderla. Hemos logrado recomponer, con mucho sacrificio, la cadena logística y hemos recuperado muchas capacidades propias que no estaban tenidas en cuenta. El T-38 Talon en Estados Unidos es de la década del 60 y sigue siendo el avión principal de la escuela de cazas de la USAF, y recién ahora están viendo para remplazarlos 60 años después, y nadie se cuestiona si el Talon puede o no seguir volando.
¿Cuál es la situación del Pampa?
Hay un contrato plurianual firmado con Fadea en el que está prevista una mayor entrega del Pampa III y la reconversión del Pampa II a Pampa III para llegar a un total de nueve a final del 2023. Por nuestra parte hemos iniciado los ensayos de armamento con cañones de 30mm, y la integración a la aviónica de los pod de 12,7mm y 7,62mm. Vamos decididamente a lograr la capacidad para que los Pampa II y III tiren con cañones, bombas, y puedan compatibilizar su aviónica para las distintas configuraciones de armamento que le pongamos. Hemos hecho un avance bastante grande. Si logramos mejorar sus prestaciones, como avión de ataque ligero, sería más que suficiente.
¿Cómo avanza el proyecto del Pucará Fénix?
nicialmente vamos a ir por seis Pucará Fénix, a los cuales nunca les hemos quitado su capacidad de autodefensa. Venimos muy avanzados. La remotorización ya está finalizada, creo que falta la certificación de la hélice, que por una cuestión de Covid no se concretó; tenemos que modernizar la cabina, y se está trabajando con Invap por el radar de apertura sintética. El MET 1 debería estar para el primer trimestre del año que viene, como muy tarde, para a partir de ahí, trabajar con Invap para evaluar el segundo radar y ajustar los detalles para tenerlo a fin del año que viene, y de ahí largar la serie. Esto tiene mucho para evolucionar, queremos hacerlo un avión de gran valor táctico y no tengo dudas que va a ser un avión altamente exportable una vez que este operativo.
¿Piensan recuperar la línea de montaje?
Yo creo que reconstituyendo las unidades que ya existen, ya sea para hacerlos Pucará Fénix o volverlos a la versión original del Pucará remotorizado y con otra aviónica, no es descabellado. El remanente de potencial que tienen las células del Pucará, no todas, aparte de las seis destinadas para el Fénix, son altamente recuperables para su versión original. Son ideas que tenemos, pero al ver el estado del material no es descabellado. Pero eso es motivo de estudio a futuro, no por ahora.
¿Y el IA-100 Malvina?
Está en la etapa de diseño. Calculo que para fin de año vamos a tener el diseño inicial. Ahí Fadea, junto con la Secretaría de Ciencia y Tecnología del Ministerio de Defensa, ya han armado un cronograma de trabajo para que el año que viene esté volando el prototipo y comenzar la producción a partir del 2023. Calculamos que, si en 2023 empieza la producción, van a estar operativos en la escuela en un año, año y medio más como mínimo.
La presidente de Fadea, Mirta Iriondo, habló de la necesidad de remplazar los Hercules y el error que fue no haber comprado los que ofrecía España. ¿Qué opciones hay para mejorar las capacidades de trasporte?
España no ofreció particularmente ningún tipo de aviones. La FAA sabía que España, para priorizar el A400, iba a dejar de lado su flota de Hercules, pero nunca fue motivo de análisis porque no están modernizados. Hoy la Argentina opera un Hercules distinto y no nos hacían falta. No fue un error de la FAA ya que queremos una flota homogénea por cuestiones logísticas. La prioridad es finalizar la inspección del TC-64 y modernizar el L-100.
¿La licitación para la compra de un Twin Otter da respuesta a la imposibilidad de recuperar la aeronave accidentada en febrero?
No hay ninguna licitación por un Twin Otter. Sí se está licitando un Saab 340. Con respecto al Twin Otter que cayó en febrero, si bien se pensaba que se podía poner en servicio, porque no había sufrido daños ni en los motores, ni en la estructura, hicimos el análisis con geólogos y glaciólogos y nadie nos pudo asegurar que el glaciar era estable y fuese seguro trabajar durante 10 a 20 días. Tomamos la decisión de dejarlo ahí, y ahora cuando venga la CAV volveremos al lugar a ver que encontramos. En base a eso hemos destinado plata del Fondef a recuperar dos que teníamos en Quilmes, uno está por salir y el otro calculo que para el año que viene. Tenemos en mente en algún momento, tratar de ir por un Twin Otter, perdimos dos en dos años. Lo más lógico es que si estamos adquiriendo material de transporte, como nos vamos a olvidar del TwinOtter, pero hoy estamos centrados a recuperar lo que tenemos, no hay una licitación por un Twin Otter.
Recientemente llegó al país el primero de los B200 que se adquirieron, ¿Cómo será la entrega de los restantes?
Los B200 van a ser 14, 12 para la FAA y dos para la Armada. A mediados de septiembre se realizó la entrega oficial del primer B200 en Paraná, unidad donde van a estar alojados la mayoría de los B200 y la cual va a estar encargada del mantenimiento. La idea es incorporar de acá a fin de año uno por mes. Como tuvimos una demora con el primero, aspiramos a llegar a cuatro antes de fin de año, no los cinco originales, y a partir de ahí no debería haber una diferencia mayor de mes y medio entre avión y avión. A ese ritmo esperamos completar diez para mediados del tercer trimestre del año que viene. Los últimos cuatro queremos traerlos desarmados y hacerles todo el mantenimiento en el país, ya sea en la Armada, que es la que más experiencia tiene, porque lo viene operando hace muchísimo tiempo o en la Armada con la colaboración de la FAA.
¿En qué estado está la compra de helicópteros de rescate?
Ese es otro tema que lo lleva adelante el ministerio de Defensa y el Estado Mayor Conjunto, quien está a cargo de la evaluación y adquisición de helicóptero de alta montaña.
Por lo que sé el proceso está muy avanzado, habían quedado dos modelos el Bell 407 y el B3 de Airbus; para fin de año, primer trimestre del año que viene debería estar resuelto.
¿Cómo avanza el programa de sistemas aéreos no tripulados?
Tenemos varios desarrollos de UAV, fraccionados. Decidimos concentrar el esfuerzo y desplegar todos los medios que tenemos, su gente y sus operadores en la base aérea Chamical como dije anteriormente. Esto ya está en marcha, estamos construyendo viviendas para alojar más personal que ira destinado allí, así que es un proyecto que va tomando cuerpo lentamente.
¿Están relacionados los programas de UAV de las distintas fuerzas?
Por ahora lo tenemos separado, pero el ministerio de Defensa está concentrando en la Secretaría de Investigación, Política Industrial y Producción para la Defensa que dirige la licenciada Daniela Castro todo lo que es UAV, y vamos a empezar a centralizar todo lo que es sensores con Invap.
Durante el acto por el día de la FFAA afirmó que tenemos una calidad de instrucción a nivel de las mejores fuerzas. ¿Es posible afirmar esto sin contar con aviones de capacidad supersónica?
Hice referencia a la instrucción primaria y básica para formas aviadores militares y de eso no tengo dudas. La instrucción en los primeros niveles está a la altura de los mejores países del mundo. El binomio Texan-Grob lo tienen varias fuerzas aéreas del mundo, y el IA-100, que va a remplazar el segmento Grob-Tecnam no va a ser menos calificado. Tenemos el Texan, que es un avión de última generación para lo que es el segmento de entrenador básico; el Pampa nos deja listos para operar un avión de 4ta generación en lo que es aviónica, y después el A4 es un avión de 3ra generación. Tenemos que lograr que toda esa capacitación y ese entrenamiento que vamos logrando en los distintos escalones se termine de concretarpara que cuando llegue el avión de 4ta generación estemos listos. Pero como instrucción en sí, estamos a la altura de las mejores fuerzas aéreas del mundo.
¿Qué se sabe del ataque y posible intento de robo a la VII Brigada Aérea de Moreno?
En la madrugada del 29 de agosto un grupo intentó entrar en un depósito, pero el sistema de seguridad funcionó muy bien y se dieron a la fuga, no hubo ningún faltante. Se atendió al problema y simultáneamente se llamó a la policía. La base está en una zona complicada y el intento fue aislado. Me enorgullece que una guardia de la FAA haya respondido con criterio, responsabilidad y de acuerdo a los protocolos que están escritos. Las bases aéreas son difíciles de mantener bien custodiadas, por su extensión y la desinversión. Por eso repito, no todo son los cazas 4º generación. Hay múltiples problemáticas en la fuerza. Como exprese antes, estamos potenciando la especialidad en Seguridad y Defensa. Esto no implica solamente saber defender con armas, hay muchísimos protocolos que respetar, leyes, reglamentos. Empezamos con algunas unidades y de a poco la idea es que la FAA vuelva a tener la seguridad que siempre tuvo que tener.
¿Cuáles son los principales objetivos y desafíos que enfrenta la FAA?
El principal desafío es hacerle sentir a la gente que su tarea es vital para la fuerza, sin importar el cargo ni el lugar geográfico. Fue fundamental haber puesto el foco, no solo en la incorporación de material, sino en la recuperación de las capacidades propias de mantenimiento y servicios. Me informan permanentemente de la recuperación de múltiples capacidades perdidas. Cuando pregunto cómo lo veníamos haciendo hasta este momento, la respuesta se repite; Se mandaba a arreglar a empresas privadas, muchas veces en el extranjero. En forma reiterada el avión permanecía 'parado' 10/15 días. Me enorgullece cuando escucho que un suboficial retirado quiere volver al hangar donde dejo su vida trabajando, para apoyar a los más jóvenes y enseñarles. Ese es el espíritu que quiero en la FAA. El espíritu de pertenencia y las ganas de aportar son vitales. El sentido de pertenencia debe ser transmitido de arriba hacia abajo, creo que es lo más importante. Ese es mi objetivo principal de gestión.
Fuente:Infodefensa