Estamos ante el primero de los aparatos encargados por el Gobierno de Tokio, que de momento es el único cliente foráneo de la aeronave. La imagen, tomada el pasado 24 de agosto, muestra a este primer aparato durante su fase de pruebas de su potente motorización, dos turbinas Rolls-Royce Allison T406/AE 1107C-Liberty. Una vez superadas estas pruebas se pasaría al primer vuelo, que daría paso a los de pruebas y aceptación, antes de ser puesto a disposición del cliente, la JGSDF, previsiblemente este mismo otoño.
El encargo japonés prevé recibir Osprey de la variante V-22B Block C, la misma que actualmente se está entregando al United States Marine Corps(USMC) de los Estados Unidos, que los denomina MV-22B.
El Osprey proporcionará múltiples capacidades a las Fuerzas Armadas de Japón, tanto en el ámbito militare como en el civil, ante desastres como terremotos y maremotos, que tanto afectan a país. La cada vez mayor agresividad de Corea del Norte, y el expansionismo chino están llevando a Japón a reforzar sus capacidades de asalto anfibio y Special Air Operations(SAO), para las que ha sido especialmente diseñado el V-22. Además, aumentará la interoperatividad con las fuerzas de los Estados Unidos en la región de Asia-Pacífico. En este sentido el USMC cuenta con aparatos de este tipo basados en la Marine Corps Air Station (MCAS) Futenma, en Okinawa, archipiélago japonés al sur de las principales islas, siendo muy habituales los adiestramientos entre las FAS japonesas y las fuerzas de los Estados Unidos aquí basadas.
Las primeras tripulaciones japonesas de los Osprey, según fuentes norteamericanas, ya se estarían entrenando en el seno del Marine Medium Tiltrotor Training Squadron (VMMT) 204, la unidad de transformación al sistema del USMC.
Fotografía: El primer V-22 destinado a Japón, durante sus pruebas de vuelo. Foto: Paul Lawrence Braymen.
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