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domingo, 25 de junio de 2017

Rusia presentó las nuevas versiones de sus clásicos y letales fusiles AK-47

El consorcio de fabricación de armas Kalashnikov, que equipa a las tropas de Moscú desde hace casi 70 años, presentó dos fusiles de asalto y una ametralladora basados en el arma de infantería más utilizada en el mundo

El consorcio de fabricación de armas ruso Kalashnikov develó las últimas versiones del ubicuo producto que viene desarrollando desde fines de 1940: el fusil de asalto AK-47.


Se trata de los nuevos fusiles AK-12 y AK-15, así como la ametralladora ligera RPK-16, que fueron presentados en un video publicado por la empresa en el que pueden verse las características y el funcionamiento de estas tres armas.

El AK-12 es un fusil de asalto en calibre 5,45 x 39 mm, de uso estándar en las fuerzas armadas rusas desde 1974. Su cadencia de tiro es de 700 disparos por minuto a un alcance máximo de 880 metros utilizando cargadores de 30 cartuchos, según datos del fabricante.

Los fusiles de asalto AK-12 y AK-15 equiparán al “soldado del futuro” ruso (Kalashnikov)

Esta nueva versión cuenta con una mira diopter ajustable y culata retráctil, e incorpora más partes de plástico que versiones anteriores.

Por su parte el AK-15 tiene similares prestaciones, pero utiliza el calibre 7,62 x 39mm, el tradicional proyectil disparado por los viejos AK-47 y gran parte de sus iteraciones en servicio en el mundo.

En tanto la ametralladora RPG-16 posee un bípode incorporado y cargadores de 96 cartuchos.

El AK-12 es, sobre todo, un equilibrado diseño que prioriza la relación calidad/precio (Kalashnikov)

Estas armas ganaron un concurso en 2015 para equipar al "soldado del futuro" o Rátnik, desarrollado por Moscú,afirmando una relación de casi 70 años entre Kalashnikov y las fuerzas armadas rusas"

Si bien no se trata de un gran salto tecnológico en lo referido a armas de infantería, las pequeñas mejoras incorporadas en estos fusiles abaratan los costos de fabricación, reducen el peso y aumentan su confiabilidad.

"Venció debido a su relación calidad/precio", explicó el viceministro Yuri Borisov luego de la victoria de Kalashnikov sobre su competidor Degtiariov, que ofrecía un fusil de asalto -el АЕК971- mucho más innovador.

J. Arosa (Tandanor): "El deseo es llegar al superávit a finales de 2018" (y2)

El presidente de CINAR, Jorge Arosa, frente al rompehielos Almirante Irízar (Foto: Irene Valiente)

En una segunda parte de la entrevista Jorge Arosa presidente del Complejo Industrial Naval Argentino (Cinar), que comprende al astillero Almirante Storni y los Talleres Navales Dársena Norte (Tandanor), desgrana la situación en la que se encontró la empresa cuando aterrizó en ella tras la llegada al Gobierno de Mauricio Macri en diciembre de 2015, analiza los logros y errores de los últimos años y lo relativo a la reparación del emblemático rompehielos ARA Almirante Irízar.

Contaba que llegar a Cinar fue como “ponerse una mochila”. ¿En qué sentido?

Como toda industria que fue marginada durante muchos años, los procesos se vuelven turbios, todo el mundo quiere sacar ventaja de las cosas y la empresa, por diversas causas, algunas justificables y otras no, estaba completamente desmadrada. Justificado, por ejemplo, es que el contrato del rompehielos Irízar no le permitió a Tandanor redeterminar precios, con lo cual seguimos comprando cosas para el Irízar en el exterior a un dólar de 16 y la Armada nos lo paga a cinco pesos. Hemos perdido en ese negocio en los últimos tres años del orden de los 680 millones de pesos (42 millones de dólares). Eso genera que no puedas invertir en la compra de nuevas máquinas y herramientas ni hacer el mantenimiento correctivo de la planta, que la gente deje de tener una capacitación adecuada...

¿Qué problemas de mercado tenía la empresa cuando se puso al frente de ella?

El problema del astillero es que no cumplían los contratos. Todavía no hemos podido recuperar el mercado de Brasil. El último buque tanque de Petrobras estuvo casi dos meses, cuando tenía para repararse en 25 días. He viajado en repetidas ocasiones a Brasil para mostrarles los números. Cuando llegamos nosotros, no creían que tuviéramos una gestión más eficiente y después con las paritarias (negociaciones salariales) de 2016 y 2017 y el dólar quieto, perdimos competitividad. Salir al mercado extranjero hoy, sobre todo al brasileño, se complejizó bastante. Ahora hicimos un muy importante esfuerzo en la última licitación para traer dos barcos de Petrobras en julio y agosto de este año, pero todavía no nos contestaron si la ganamos o no.

¿Cómo han sido sus últimos resultados?

En 2016 hemos perdido 400 millones de pesos (25 millones de dólares) menos que en 2015. Estamos en el orden de los 300 millones de pérdida (18 millones de dólares). El deseo es llegar al superávit a finales de 2018 y debería ser así.

¿Redujeron plantilla?

Tenemos 548 personas en plantilla y cuando llegamos eran 649. Además, entraban unos 700 contratistas diariamente al astillero y ahora son unos 115 y cuando se vaya el Irízar no van a entrar más de 50.

¿Han regularizado la deuda con el Fisco argentino?

Con la AFIP (Administración Federal de Ingresos Públicos) teníamos 300 millones de pesos cuando llegamos. Si bien hemos colocado la gran deuda, sobre todo impositiva, en planes, esos planes tienen una duración de 96 meses y pagamos una fortuna por mes. La vamos disminuyendo, pero entre el capital y los intereses es pesada, aunque el Ministerio nos respalda en la ejecución para poderla pagar.  

Y en cuanto a la capacitación de la mano de obra y el cumplimiento de los contratos, ¿qué había y que hay ahora?

Tandanor es la mejor mano de obra de todo el Atlántico Sur, lo dice el mercado. Y los armadores cuando vienen a construir o a reparar buscan el precio adecuado; la mejor mano de obra, que la teníamos cuando llegamos; y el cumplimiento de los contratos, que no lo teníamos y que desde hace seis meses ya es casi del 100%.Tenemos todo nuestro astillero en blanco, con todos los certificados. Hemos recuperado un poco el prestigio que habíamos perdido, básicamente, por no cumplir.


El Irízar se había convertido en un problema serio, ¿no hubiera sido mejor abandonar el proyecto?

Es un proyecto estratégico nacional y yo no opino de las decisiones estratégicas de los antecesores ni de los que las toman ahora porque hay que tener mucho cuidado qué fue lo que entró en juego en ese momento. Pero sí rescato un montón de cosas: se hizo en Argentina, la mano de obra se formó, y finalmente el costo global de la reparación es mucho menor a haber hecho uno nuevo o haberlo reparado en el extranjero. Los tiempos en los cuales se hizo no son óptimos pero tampoco pésimos. Con el Irízar, además, adquirimos una capacidad que no teníamos en el astillero: la de habitabilidad. Hicimos todos los muebles, cielos rasos, mamparos... Y eso también se vuelca en la capacidad de hacer nuevos trabajos.

¿No fue un error de la anterior gestión?

Es feo hablar de la gestión anterior. Respeto que a pesar del contrato que tenían, a pesar de un Gobierno muy desordenado, lo que se hizo en el Irízar se hizo bien, y no es poca cosa. Tandanor tampoco había tenido obras de esa envergadura, así que me saco el sombrero.

¿Que salga a navegar ayudará a quitarle un lastre a la empresa?

Sin duda. Estoy convencido de que un país como la Argentina, en el traste del mundo, rodeado de agua por todos lados, y que todo su comercio exterior depende de las vías marítimas, debe tener un astillero constructor como queremos que sea el Storni para que seamos el traccionador de la industria naval. Tenemos cientos de personas del mundo que han venido a visitar las instalaciones y no pueden creer lo que hay. Debemos tener los números claros y los procesos bien encaminados para que cuando venga la plata, concretarlos en barcos sea mucho más fácil.

Adjudicado contrato por US$ 27 M para producción y entrega de 4 helicópteros Bell 412EP para FAA

El 20 de junio pasado el Departamento de Defensa de los Estados Unidos notificó la adjudicación a Bell Helicopter Textron Inc de un contrato para la producción y entrega de cuatro helicópteros Bell 412EP. El monto del acuerdo ascendería a u$s 27.195.000.

El contrato forma parte de la venta vía Foreign Military Sale autorizada por el Estado de Departamento norteamericano, la cual fuera publicada por la Defense Security Cooperation Agency en noviembre de 2015. Por aquel entonces se informó que la venta incluía cuatro Bell 412EP, equipo asociado, partes, soporte logístico, capacitación de personal, flete y asistencia técnica, todo ello por un costo estimado de u$s 80 millones de dólares.


Actualmente la VII Brigada Aérea de la Fuerza Aérea Argentina, con asiento en Moreno, cuenta con dos Bell 412 EP (H-101 y H-102), flota que es complementada por los Bell 212 y UH-1N. La unidad también cuenta con los helicópteros de transporte Mil Mi-171E y Hughes 369/500.


Los cuatro Bell 412EP serán fabricados bajo requerimientos y especificaciones técnicas de la Fuerza Aérea Argentina, haciendo hincapié en su configuración militarizada que lo convertirá en un medio apto para misiones de búsqueda y rescate de combate (CSAR). Se espera que los nuevos helicópteros reciban paneles de blindaje, flotadores en sus patines y guinche/grúa de carga. Entre otras de sus capacidades, los 412EP contarán con cabina 100% compatible con equipos de visión nocturna, sistema electro-óptico FLIR y faro de búsqueda tipo Nightsun.


Según lo publicado por el Dpto de defensa norteamericano, se estima que la entrega de las cuatro unidades se realice para el 30 de noviembre del corriente año. Una vez completada, la Fuerza Aérea Argentina dispondrá de seis Bell 412EP a lo que sumaría la pronta habilitación del Área Material Quilmes para realizar el mantenimiento de los mencionados helicópteros hasta ICM.

http://helihub.com