EDGARDO AGUILERA
Carlo Magrassi |
En Defensa hay expectativa por la presencia de Magrassi porque abriría las puertas a nuevos proyectos además del que se selló en 2016 con la firma italiana Beretta, un acuerdo que venía de la gestión Kirchner.
Está previsto un encuentro de Magrassi con empresarios italianos y argentinos para avanzar en iniciativas de cooperación en ciencia, tecnología y producción para la defensa. No es su función impulsar negocios, sino dar el marco institucional a las conversaciones que van a llevarse a cabo para el interés de ambas naciones.
El grupo aeroespacial y de defensa Leonardo (antes era la marca Finmeccanica, además de Fincantieri (industria naval e infraestructura), Iveco y Telespazio se agregaron al viaje del secretario. La embajada aclaró que no forman parte de la misión oficial
SIRIO CLASS
El esfuerzo diplomático italiano es que no se confunda la presencia de Magrassi con el interés comercial. "Se trata de una agenda de consolidación del vínculo cooperativo, ver cómo podemos complementarnos en actividades de mutuo beneficio", aclaró una fuente diplomática italiana
C-27J Spartan
El consorcio industrial militar Leonardo presentó a fin de 2016 el avión de transporte C-27J Spartan, lo evaluó la Fuerza Aérea y el Ejército en Córdoba en lanzamiento de paracaidistas y aterrizajes y despegues en pistas cortas y no preparadas; también hizo demostraciones en la base antártica Vicecomodoro Marambio. Macri prefirió el producto francés, decidió la compra -aún sin concretarse- de 3 aviones Airbus Military C-295, dos para la Fuerza Aérea y uno para la Armada. Fincantieri había ofrecido a la Armada Argentina navíos patrulleros, modernización de astilleros y de los destructores y corbetas de la clase Meko.
Convenio
Junto a Lostri, Magrassi va a repasar la marcha del convenio que en 2016 firmaron los ministros Martínez y Roberta Pinotti sobre producción en la planta de Fabricaciones Militares Fray Luis Beltrán de pistolas y fusiles con la tecnología de la marca Beretta
Junto a Lostri, Magrassi va a repasar la marcha del convenio que en 2016 firmaron los ministros Martínez y Roberta Pinotti sobre producción en la planta de Fabricaciones Militares Fray Luis Beltrán de pistolas y fusiles con la tecnología de la marca Beretta
En la carpeta de posibles áreas de interés está la industria aeronáutica estatal. La Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA) necesita un impulso a sus dos unidades de negocios: la fabricación y el mantenimiento. El severo ajuste ordenado por la Jefatura de Gabinete y la pérdida de una mística que supo ganarse en el pasado con la fabricación de máquinas legendarias tienen inmovilizada a FAdeA. El martes pasado el titular de la fábrica, Ércole Felippa, pidió ayuda financiera al ministro Martínez. Relaciones Exteriores a través del exvicecanciller Carlos Foradori gestionó nichos donde poder desarrollar la actividad de FAdeA. La cooperación internacional puede ser el instrumento. Otro punto es que el país tenga una ley de offset, mecanismo que asegura la transferencia de tecnología, conocimiento y desarrollo a las industrias aeronáuticas locales.
La brasileña Embraer, hoy un actor económico global, tuvo un fuerte crecimiento tecnológico a través de un acuerdo firmado con Italia en los setenta (y su correspondiente offset) por el que se armaron y vendieron 180 aviones jet entrenadores MB 326 Aermacchi, denominados Xavante. Algunos de esos aparatos los utilizó la Aviación Naval criolla. El horizonte de FAdeA estaría en la producción de partes y conjuntos destinados a Italia tal como lo hace para Embraer en el programa de fabricación del avión de transporte táctico KC-390.
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