El primer contrato establece el desarrollo de una aeronave de demostración que se espera que vuele en 2026
Los gobiernos de Alemania y Francia firmaron el primer contrato con Airbus, Dassault y sus socios para iniciar el programa FCAS (Future Combat Air System) que dará lugar a un avanzado avión de combate europeo, así como a los sistemas auxiliares.
Denominada Fase 1A, la etapa prevé el proyecto de construcción de un avión de demostración, que se espera que vuele para 2026. Además del nuevo caza de la sexta generación, el consorcio de empresas también desarrollará un vehículo aéreo no tripulado, un software de nubes de combate y un nuevo motor para el avión. Esta primera fase tiene un plazo de 18 meses, en la que se iniciará la fase 1B, que incluye la participación de España, otro socio del proyecto.
Dassault, famosa por sus cazas Mirage y Rafale, tendrá como misión principal diseñar el NGF (New Generation Fighter) con el apoyo de Airbus, que se encargará de diseñar el vehículo aéreo no tripulado junto con MBDA, especialista en armas guiadas.
Safran y MTU Aero Engines serán responsables de desarrollar un nuevo sistema de propulsión para el caza, mientras que Thales y Airbus estudiarán el concepto de nube de combate.
Caza Europeo
El programa de la FCAS tiene la misión de reemplazar a la 4ª generación de cazas Rafale y Eurofighter Typhoon. Con un costo de mil millones de dólares, el proyecto trata de repetir las asociaciones europeas del pasado, pero con la esperanza de reunir a más países.
Sin embargo, el Reino Unido ha decidido desarrollar su propia 6ª generación de cazas y ya cuenta con el apoyo de Suecia e Italia.
A pesar de esta competencia, los expertos creen que los dos programas pueden en el futuro fusionarse o establecer algún tipo de asociación que reduzca los costos para las naciones participantes. Por ahora, Francia y Alemania han tomado la delantera.
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