La presidenta de la Fábrica Argentina de Aviones 'Brigadier General San Martín' (Fadea) Mirta Iriondo, y el rector de la Universidad de la Defensa Nacional (Undef), Jorge Battaglino, mantuvieron una videoconferencia para efectivizar el convenio de colaboración entre las dos instituciones. Entre una de las colaboraciones proyectadas se encuentra la actualización del avión IA-100.
Con la firma de este convenio se dio inicio a un proceso de cooperación entre Fadea y Undef en las áreas de formación, investigación y desarrollo tecnológico, que faciliten la cooperación e intercambio en materia de capacitación de recursos humanos, capacitación laboral, asesoramiento y servicios técnicos, investigación aplicada, desarrollo tecnológico y pasantías/prácticas profesionales.
En diálogo exclusivo Iriondo destacó que este "es un acuerdo macro que va a dar lugar a convenios más específicos", entre ellos, el de la actualización del IA-100, el avión de fabricación nacional para el entrenamiento civil y militar.
Cabe recordar que hace un par de semanas, el ministro de Defensa argentino, Agustín Rossi, le confirmó a este medio que ya se encontraban trabajando en conjunto con Fadea para el relanzamiento del avión biplaza acrobático con "un novedoso esquema de financiamiento".
Al respecto, la presidenta de Fadea declaró tener "mucha expectativa" y que el proyecto se encuentra en la etapa de ingeniería de diseño.
En cuanto a plazos y costos de producción, Iriondo estimó que el primer prototipo de la aeronave realice su primer vuelo para fines de 2021 y que, sumado a los moldes y la línea de producción, va a requerir una inversión inicial de cuatro millones de dólares.
Cabe destacar que Defensa accederá a los aviones al precio de costo, que a día de hoy, rondaría los 600.000 dólares por unidad.
El siguiente paso sería recién en el 2022, cuando se busque la certificación FAR (por las siglas en inglés de Regulaciones Federales de Aviación).
En un principio, este avión con tren retráctil será utilizada por la Fuerza Aérea Argentina (FAA) y la Armada Argentina (ARA), aunque Iriondo destacó que la idea es aprovechar la línea de producción para hacer un avión utilitario de cuatro plazas de manera que pueda llegar al mercado de aviación civil.
A su vez, una de las metas de Fadea es expandir el mercado de la aeronave a las Fuerzas de Seguridad, como así también a otras Fuerzas Armadas de la región a través de una campaña "agresiva", que incluya atractivos planes de financiamiento como el leasing.
Iriondo tampoco descartó una posible coproducción a futuro de algunas aeronaves con México, debido a que el país norteamericano carece de una empresa de este tipo pero cuenta con mano de obra calificada.
Fuente:Fadea
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