La Defensa rusa informa de la destrucción de más armamento suministrado por Occidente a Ucrania, lo que se ha concretado con armas de alta precisión.
Según el Ministerio ruso de Defensa, las fuerzas del Ejército de la Federación Rusa atacaron el domingo otros dos hangares en los que se almacenaba obuses estadounidenses Howitzer y más de 1000 proyectiles para estas piezas de artillería.
El portavoz de la Cartera rusa, Ígor Konashenkov, también dio a conocer que las fuerzas del país “atacaron con armas de alta precisión un emplazamiento temporal de una unidad de artillería ucraniana y un arsenal en el Combinado Cerámico de la ciudad de Sloviansk”.
De igual manera, pormenorizó que 100 efectivos, más de 1000 proyectiles de artillería para obuses M-777, de fabricación estadounidense, alrededor de 700 proyectiles para lanzaderas múltiples Grad, 17 puestos de mando, cuatro pelotones de lanzaderas múltiples Grad y “dos hangares con obuses M-777 utilizados para bombardear las zonas residenciales de la ciudad de Donetsk (este)” fueron destruidos.
Por otro lado, Konashenkov ha afirmado que la Fuerza Aeroespacial del país euroasiático logró eliminar tres puestos de mando en las localidades de Soledar, Minkivka y Bajmut, en la región de Donetsk, además de un batallón de la formación Kraken, calificada por Rusia como nacionalista, en la región de Járkov.
A su vez, la Fuerza Aérea ucraniana ha sufrido grandes pérdidas tras el derribo de dos aviones Su-25 en Barvínkovo, región de Járkov, y Troitsk, Donetsk, tres drones en la región de Zaporiyia y Járkov, tres misiles Tochka-U y 20 proyectiles Uragán en la región de Jersón, y cinco misiles Smerch en la región de Járkov, detalló el funcionario ruso.
Moscú inició el pasado 24 de febrero su “operación militar especial” en Ucrania, con el objetivo de la “desmilitarización” y la “desnazificación” de Kiev, y ha reiterado que su operación no implica ninguna amenaza para la población civil de Ucrania.
Esto, mientras que el ministro de Defensa de Ucrania, Oleksii Reznikov, en una entrevista con el diario estadounidense Wall Street Journal (WSJ), publicada la misma jornada, admitió la elevada cifra de muertos y pérdidas materiales que experimentan sus fuerzas militares en el campo de batalla ante Rusia.
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